Lo que no servía y apestaba en el secuestrado PUP fue eliminado mediante jornada de tequio

(*) Y como siempre lo subrayó su fundador: Heriberto Pazos Ortiz (+), hoy más que nunca, “Unidad Popular seguirá siendo voz de los que nunca han sido escuchados”

Mario GIRÓN / Jaime GARCÍA
Con toda la fuerza de un destino empezando a iluminar el presente del Partido Unidad Popular (PUP) y, en donde la corriente de su militancia puso punto final a la negra noche que embargaba al primer partido indígena a nivel Latinoamérica, ahora, con una importante jornada de tequio en lo que se conoce como la casa del pueblo “Heriberto Pazos Ortiz”, arrancaron una nueva semana de trabajo.

Encabezados por la nueva dirigencia surgida de una planilla de unidad, liderada por Saúl Pazos Pineda, este lunes la militancia del partido indígena se convirtieron en nuevo ejemplo de unidad y trabajo en equipo desde la casa sede del PUP, desde donde ya despachan como no se había visto en los últimos 13 años.

Mientras Saúl Pazos Pineda encabezada a un grupo de trabajo, en otra coordenada, Eleazar Ortiz, en calidad de secretario general del PUP, al igual de una leal y comprometida militancia de la organización social 23 de Octubre, liderada por Alejandro Escobar, con orgullo y decisión limpiaban, y lanzaban al fuego carrizo y yerba mala la cual nunca dejó de crecer y multiplicarse a lo largo y ancho de 13 años.

Se cumplió, alcanzaron el objetivo de limpieza:
Barrieron todo lo malo, lo muerto que ya apestaba. Eliminaron la porquería. Al fuego lo que no sirve y perjudicaba. Se marcharon los malos recuerdos, el recuerdo de tristeza, saqueo y corrupción. Una buena barrida entre muchas, muchas manos, limpio la casa que durante más de dos sexenios fue mancillada. También fue lavada. Solo así borraron el maquillaje que escondía un verdadero rostro apartado, muy lejos de la verdadera causa indígena.

O como mejor lo narra, el liderazgo de la 23 de Octubre, Alejandro Escobar:

“Se logró, a pesar del secuestro a las instalaciones, por parte de un gavilla de bandidos, logramos recomponer y darle vida al partido, el saqueo y deterioro que le dejaron al pueblo, se vio rebasado por la participación de la gente, no nos da miedo empezar de cero aprendimos hacerlo al lado de Heriberto Pazos, con la construcción del partido, ante el rechazo en su momento de todos los institutos políticos (PRI, PAN, PRD entró otros), según ellos por el motivo de que “ los pobres y los indígenas sólo deben servir para votar y no para ser votados”, la formación de la Organización Social 23 de Octubre, también empezó de cero y precisamente remamos en contra del desprestigio de quien solo ha dividido al pueblo, hoy queremos decirles a nuestros compañeros del Comité Ejecutivo de Unidad Popular, a Saúl Pazos y Eleazar Ramírez que no están solos, que el tiempo nos ha dado la razón”.

“Gracias a todas y todos, quienes hicieron posible este tequio, para dignificar las oficinas de la que fue y seguirá siendo la casa del pueblo, un proyecto como lo decía nuestro dirigente, Heriberto Pazos, “Unidad Popular es la voz de los que nunca han sido escuchados”.